jueves, 25 de septiembre de 2008

Manifiesto

El aborto conlleva siempre la muerte violenta de un ser humano y supone un terrible drama para la mujer que lo sufre, forzada por las circunstancias.

La ley española abandona a la mujer ante sus problemas y la empuja insolidariamente al aborto. Toda “ley del aborto” es una terrible hipocresía contra las mujeres, además de una atroz injusticia para con los niños a los que desprotege.

En España no se ofrece información ni ayudas sociales a las mujeres embarazadas en situaciones difíciles, y sin embargo sí existe financiación para que vayan a abortar.

Ahora el Gobierno quiere poner los medios legales para que se cometan más abortos, dejando aún más sola a la mujer, a pesar del daño físico y psicológico que supone para ella. Más aborto significa menos protección a la vida y más inseguridad para la mujer.

Por ello, exigimos que nuestras leyes protejan el derecho a vivir y a ser madre, amparando la vida en todo momento y circunstancia y ayudando a las mujeres embarazadas a superar cualquier problema que un embarazo imprevisto pueda generarles.

Al mismo tiempo, nos oponemos a una nueva ley del aborto que sólo traerá más muertes y más sufrimiento para miles de mujeres.


domingo, 21 de septiembre de 2008

Luz del Mundo



A estas alturas de Septiembre aun queda tiempo para el comienzo de la Semana Santa y unos días más para el momento de la Resurrección, pero no podemos olvidar que nuestra fe se basa en Cristo Resucitado vencedor entre las tinieblas de la muerte y del pecado. Por eso cada Domingo y cada día celebramos este misterio.


La segunda marcha que interpreta la Agrupación Musical Virgen de los Reyes a la salida del Resucitado de Sevilla tiene como titulo "Y al Tercer Día..."

domingo, 14 de septiembre de 2008

CRUX FIDELIS


Crux fidelis, inter omnes arbor una nobilis: nulla talem silva profert fronde, flore, germine. Dulce lignum, dulcis clavos, Dulce pondus sustines.
¡Oh cruz fiel, árbol único en nobleza! Jamás el bosque dió mejor tributo en hoja, en flor y en fruto. ¡Dulces clavos! ¡Dulce árbol donde la Vida empieza con un peso tan dulce en su corteza!

Pange lingua gloriosi praelium certaminis, et super Crucis trophaeo dic triumphum nobilem: qualiter Redemptor orbis immolatus vicerit.
Cantemos la nobleza de esta guerra, el triunfo de la sangre y del madero; y un Redentor, que en trance de Cordero, sacrificado en cruz, salvó la tierra.

De parentis protoplasti fraude facta condolens, quando pomi noxialis morte morsu corruit: ipse lignum tunc notavit, damna ligni ut solveret.
Dolido mi Señor por el fracaso de Adán, que mordió muerte en la manzana, otro árbol señaló de flor humana, que reparase el daño paso a paso.

Hoc opus nostrae salutis ordo depoposcerat, multiformis proditoris ars ut artem falleret: Et medelam ferret inde, Hostis unde laeserat.
Y así dijo el Señor: "¡Vuelva la Vida, y que el Amor redima la condena!" La gracia está en el fondo de la pena, y la salud naciendo de la herida.

Quando venit ergo sacri Plenitudo temporis, missus est ab arce Patris Natus, orbis conditor; atque ventre Virginali Carne factus prodiit.
¡Oh plenitud del tiempo consumado! Del seno de Dios Padre en que vivía, ved la Palabra entrando por María en el misterio mismo del pecado.

Vagit infans inter arcta Conditus praesepia: Membra pannis involuta Virgo Mater alligat: Et manus, pedesque, et crura Stricta cingit fascia.
¿Quién vió en más estrechez gloria más plena, y a Dios como el menor de los humanos? Llorando en el pesebre, pies y manos le faja una doncella nazarena.

Lustra sex qui jam peracta Ttmpus implens corporis, Se volente, natus ad hoc Passioni deditus, Agnus in Crucis levatur Inmolandus stipite.
En plenitud de vida y de sendero, dió el paso hacia la muerte porque él quiso. Mirad de par en par el paraíso abierto por la fuerza de un Cordero.

Hic acetum, fel, arundo, sputa, clavi, lancea: Mite corpus perforatur: Sanguis unde profluit: Terra, pontus, astra, mundus quo lavantur flumine!
Vinagre y sed la boca, apenas gime; y, al golpe de los clavos y la lanza, un mar de sangre fluye, inunda, avanza por tierra, mar y cielo, y los redime.

Flecte ramos arbor alta, tensa laxa viscera; Et rigor lentescat ille, quem dedit nativitas: Ut superni membra Regis Miti tendas stipite.
Ablándate, madero, tronco abrupto de duro corazón y fibra inerte; doblégate a este peso y esta muerte que cuelga de tus ramas como un fruto.

Sola digna tu fuisti ferre saecli pretium; atque portum praeparare nauta mundo naufrago, quam sacer cruor perunxit fusus Agni copore.
Tú, solo entre los árboles, crecido para tender a Cristo en tu regazo; tú, el arca que nos salva; tú, el abrazo de Dios con los verdugos del Ungido.

Aequa Patri Filioque, inclito Paraclito, Sempiterna sit beatae Trinitati gloria; Cujus alma nos redemit atque servat gratia. Amen.
Al Dios de los designios de la historia, que es Padre, Hijo y Espíritu, alabanza; al que en la cruz devuelve la esperanza de toda salvación, honor y gloria. Amén.